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Putin presume de que el apoyo de Occidente a Ucrania flaquea: “La victoria está de nuestra parte” | Internacional

“Habrá paz cuando logremos nuestros objetivos. No han cambiado”. El presidente ruso, Vladímir Putin, ha intentado mostrar que confía en ganar la guerra mientras el líder ucranio, Volodímir Zelenski, apela desesperado a Occidente para que no flaquee su ayuda. La guerra se encamina a su tercer año y el líder ruso espera que su rival sea abandonado y poder culminar sus conquistas. “Ucrania no produce hoy casi nada. Intentan salvar algo, pero no producen casi nada. Reciben todo gratis. Pero estos regalos pueden acabar algún día. Y aparentemente esto se está acabando”, ha afirmado este jueves el mandatario ruso.

Putin ha querido transmitir a su pueblo —y a Occidente— que tiene todo bajo control: por primera vez desde que ordenó la invasión de Ucrania, en febrero de 2022, se ha atrevido a realizar su gran rueda de prensa anual y, a diferencia de otras ocasiones, no ha hecho ninguna promesa relevante para ganarse el apoyo de los rusos: ni en el campo de batalla, donde el frente está estancado, ni en el plano económico, pese a que los pensionistas le afean en directo que los precios de los productos básicos se han multiplicado varias veces. “La victoria está de nuestra parte”, ha advertido.

El presidente ruso ha repetido que sus objetivos son “la desnazificación y desmilitarización de Ucrania, su estatus neutral”. Es decir, tomar su control. Hace pocos días, un exasesor muy cercano al presidente ruso, Serguéi Markov, lo tradujo en otras palabras al hablar del fracaso de la ofensiva inicial: “No se preparó bien. La idea era cambiar el régimen político y establecer un control efectivo sobre la mayoría del territorio de Ucrania”. Este jueves, Putin aseguró que gran parte del país vecino les pertenece: “Todo el sudeste de Ucrania ha sido históricamente territorio ruso. Toda la región del mar Negro, como resultado de las guerras ruso-turcas, pasó a manos de Rusia. ¿Qué tiene que ver Ucrania con esto?”, ha afirmado durante una rueda de prensa de más de cuatro horas en la que también ha declarado que Odesa “es una ciudad rusa”. Sobre la propia Kiev como parte de su proyecto irredentista ya escribió en el pasado para justificar la guerra.

En otro momento de su intervención, un médico de la región ucrania ocupada de Zaporiyia advirtió de que hacen falta como mínimo el doble de especialistas en su zona para atender a los civiles, incluidos oncólogos. “El doctor ha dicho: ‘no tenemos suficientes especialistas y médicos, como en toda Rusia. Es decir, percibe su región como parte de Rusia”, ha subrayado un sonriente Putin mientras imitaba las comillas de una frase con las manos.

Una mujer camina este jueves en Moscú frente a una pantalla que muestra una cita de Vladímir Putin en su rueda de prensa anual. MAXIM SHEMETOV (REUTERS)

La invasión de Ucrania también desgasta a los rusos. Según una encuesta reciente del centro independiente Levada, un 21% de la población habría preguntado a su presidente: “¿Cuándo acabará la operación militar/la movilización?”. Putin ha respondido a la segunda parte de esta pregunta: “A finales de este año contaremos con alrededor de medio millón de combatientes —entre los más de 300.000 reclutados en la leva del año pasado y voluntarios—. ¿Para qué necesitamos una movilización? Hoy no es necesaria”, ha asegurado el mandatario, pese a que el desgaste se prolonga sin un horizonte claro y el Ministerio de Defensa ha advertido de que los movilizados y los soldados profesionales no volverán a casa hasta acabar la guerra.

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“Nuestras Fuerzas Armadas están mejorando su posición a lo largo de toda la línea de contacto”, ha asegurado el mandatario durante su intervención. Según sus cifras, el contingente ruso en Ucrania suma 617.000 combatientes actualmente. Por cierto, el Kremlin también negaba que fuera a haber una movilización semanas antes de decretarla en septiembre de 2022. Pese al triunfalismo de Putin, los corresponsales de guerra de los medios afines al Kremlin han discutido con él sobre la situación real en el frente. Dmitri Kulko, periodista de Pervyi Kanal, ha advertido al presidente ruso de que sus tropas carecen de drones suficientes. “No se puede no ver que la situación —en el frente— está mejorando. ¿Es verdad? Dime que es verdad”, ha interpelado Putin al reportero. “Está mejorando, sí”, ha respondido Kulko.

“Aún tenemos una línea de frente de casi 2.000 kilómetros”, ha agregado Putin. “Por supuesto, tal vez no todo sea entregado a tiempo, pero nuestra producción está creciendo y se compra mucho, incluso de forma privada, en el extranjero. El Estado, el Ministerio de Defensa y la industria trabajan activamente”, ha reiterado el presidente ruso.

“Putin se pone del lado del Ministerio de Defensa y rechaza las críticas, claramente desconfía de lo que le dice Kulko. Muy revelador”, ha destacado la politóloga Tatiana Stanovaya. “Una extraña intervención desde la lógica electoral. Putin discute con todo el mundo, justifica a las autoridades y califica los problemas graves de “fallos técnicos”. Esto significa que Putin no va a adular al pueblo y no se siente políticamente vulnerable”, ha opinado en las redes sociales la fundadora del centro de análisis R.Politik.

Para Putin, la guerra de Ucrania no será el final. El líder ruso ha insistido en varias ocasiones durante su discurso en la necesidad de una educación “patriótica-militar” en las escuelas en la que participen los combatientes llegados del frente. “Las guerras no las ganan los generales, sino los maestros y sacerdotes”, dijo el presidente ruso, que aseguró haber citado a Otto von Bismarck, canciller alemán del siglo XIX.

Subidas de precios

El evento, llamado Resumen del Año, unía por primera vez la rueda de prensa anual de Putin con su Línea directa, otro evento que celebraba una vez al año en el que respondía las preguntas seleccionadas de sus ciudadanos. El mandatario ha asegurado que el país cuenta con fondos “para seguir adelante”, y ha anunciado que el producto interior bruto crecerá un 3,5% este año, aunque no ha explicado que Rusia ha mutado a una economía de guerra en la que el Estado gasta un tercio de su presupuesto en defensa y seguridad. “Lamentablemente, tenemos una inflación del 8%”, ha agregado Putin, sabedor de que le preguntarían por el aumento de los precios, una de las grandes preocupaciones de la ciudadanía.

Sus cifras oficiales chocan con la percepción de los propios rusos. “Nunca ha habido tales precios”, le ha espetado en directo Irina Akopova, una jubilada, antes de repasar el coste de varios alimentos básicos. “Los precios se han disparado tres veces (…) No recibimos una pensión de millones de rublos”, ha lamentado, antes de denunciar que “no hay a quién dirigirse” a medida que elevaba cada vez más el tono de voz. El presidente le ha respondido que sus ministros afirman que “todo está en orden”, lo que ha desatado algunas risas entre los cientos de invitados al acto.

Donde los rusos ven problemas, el presidente asegura que existen oportunidades. El banco central subió hace unas semanas los tipos de interés al 15% ante la devaluación del rublo, y Putin ha manifestado este jueves que esto “es una buena noticia para el que quiere guardar dinero en los bancos rusos”. Asimismo, ha hecho énfasis en que el desempleo ha alcanzado un mínimo histórico del 2,9%, aunque las empresas denuncian que la falta de trabajadores por la crisis, la movilización y el exilio es un problema para mantener su actividad y ello redunda en salarios más altos —y por tanto más inflación—.

El estado de salud de Putin también ha suscitado comentarios durante el evento. La conferencia se ha prolongado más de cuatro horas, aunque Putin tosía constantemente desde el primer minuto, algo habitual en sus intervenciones en los últimos años. “Lo siento, el aire condicionado molesta”, se ha excusado.

El líder ruso tiene prácticamente garantizado su quinto mandato el próximo año, con lo que alcanzaría en 2030 las tres décadas al frente del país. Durante su intervención, Putin ha bromeado sobre la represión de la oposición. Preguntado si existe una caza de brujas contra Alexandra Bayazitova, una periodista que ha sido condenada a 14 años de cárcel por supuesta extorsión, el mandatario ha resumido la persecución que sufren sus rivales con su comentario: “No te pases. ¿Qué hizo? ¿Acaso es una figura importante de la oposición a la que perseguir?”.

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By Xilda Borrego Nino

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